Urbanizaciones Históricas de Boadilla

Un Ambiente Perfecto Para Una Familia Feliz

Vivir en contacto con la naturaleza a un precio razonable es posible en Boadilla del Monte. Todos aquellos que disfrutan dando paseos por el campo, haciendo deporte al aire libre y a la vez rehuyen del estrés de la ciudad, tienen una alternativa en nuestro municipio. Olivar de Mirabal, Parque Boadilla, Bonanza, Pino Centinela, Valdecabañas y Valdepastores, o lo que viene siendo lo mismo, las Urbanizaciones Históricas de Boadilla, se presentan como la opción perfecta para ellos.

Todas ellas son grandes urbanizaciones consolidadas, ubicadas en la zona oeste del municipio, formadas por chalets unifamiliares con parcelas muy extensas, que ponen a disposición de sus exclusivos vecinos servicios y dotaciones Premium.

Sus orígenes se remontan a los años 60 y 70 y aunque todas ellas fueron creadas para residentes de alto poder adquisitivo, durante los primeros años fueron habitadas por un espectro social más amplio: residentes en Madrid que veían en la zona la ocasión perfecta para tener una segunda vivienda, atraídos por el bajo precio de los terrenos.

Sin embargo, poco a poco con el crecimiento del área metropolitana de Madrid, estas urbanizaciones finalmente han acabado transformándose en las áreas residenciales exclusivas y de alto poder adquisitivo para las que fueron diseñadas. En la línea de otras de similares características en los municipios cercanos de Pozuelo de Alarcón, Majadahonda, Las Rozas o Villaviciosa de Odón.

Servicios de gran calidad

En cuanto a servicios, al tratarse de núcleos urbanos muy consolidados pueden presumir de ofrecer a sus vecinos una amplia y variada oferta de equipamientos. Especialmente destacable es su oferta educativa, compuesta tanto por centros públicos como privados para todas las edades; polideportivas, lo que ofrece la posibilidad de practicar cualquier actividad indoor y por supuesto, numerosas zonas verdes, para todos aquellos que prefieran ejercitarse al aire libre.

La seguridad, lo primero

Al igual que sucede con Boadilla, todas las urbanizaciones históricas pueden presumir de ser unas de las zonas más seguras de la Comunidad de Madrid. Además de la policía local y de la presencia de la guardia civil, estas zonas cuentan con un férreo control de accesos, videovigilancia y patrullas de seguridad privada en coche que mantiene el orden en sus calles.